En este inicio de 2015, sentimos la profunda conmoción que provoca este ataque en el corazón de la sociedad francesa y el horror que siente la población. Frente a este intolerable menoscabo de la libertad de expresión, queremos reafirmar aquello por lo que luchamos, los valores que defendemos:
Creemos que la solidaridad es más fuerte que la violencia.
Llamamos a que todos, individuos, comunidades religiosas, Iglesias y asociaciones, se unan al impulso fraterno que mostrará que existe una fuerza en medio de la oscuridad.
Creemos que el diálogo es más fuerte que el terror.
Llamamos a que todos, individuos, comunidades religiosas, Iglesias y asociaciones, se comprometan públicamente al servicio de una laicidad del diálogo y del respeto de la libertad de conciencia.
Llamamos a que todos, individuos, comunidades religiosas y asociaciones sigan construyendo una Francia y un mundo fraternos.
No dejaremos que nadie asesine a la Esperanza.
Llamamos a que todos, individuos, comunidades religiosas, iglesias y asociacionesse unan a todos aquellos que, en Francia y en el mundo, luchan contra la intolerable inhumanidad.
JUNTOS conseguiremos afrontar estos retos.
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